Ruta de fin de semana por Barcelona, donde Tenemosqueir si pasamos unos días en tierras de calçots

De Ruta por Barcelona Tenemosqueir

Vivimos en Madrid y eso nos impide visitar tanto como nos gustaría los maravillosos restaurantes de otras ciudades. Pero no pasa nada, de vez en cuando nos escapamos un fin de semana para descubrir donde tenemosqueir si visitamos lugares como…. esta vez, Barcelona. 

Os vamos a contar nuestros pasos gastronómicos. Hemos pensado agrupar todos los restaurantes en un único post, para resumir nuestra experiencia catalana completa. Así que descuelga tu gorra, busca tu riñonera, carga a tope la batería de tu cámara, coge tu crema protectora de sol y date prisa que el AVE sale ya.

Salimos el viernes desde la redacción de Tenemosqueir. Tenemos por delante dos cenas y dos comidas. Hay que seleccionar  bien y, aunque sabemos que vamos a tener que dejar de ir a sitios que nos apetecen mucho, vamos a intentar montar un plan molón donde podamos juntar comidas típicas y planes turísticos. Un todo en uno. Un completo.

1. La Venta, gastronomía de mar camino del monte Tibidabo

DIRECCIÓN: Plaça Doctor Andreu s/n, Barcelona // TELÉFONO: 93 212 64 55// PRECIO: 35-45 €/persona

Llegamos el viernes por la noche con hambre y ganas de cenar. Pero tenemos que esperar un poco. Vamos a ir a La Venta, que está camino del Monte Tibidabo. Así, además de comer, tendremos unas vistas espectaculares de la ciudad.

A Restaurante La Venta Barcelona Tenemosqueir

En ese momento no lo sabíamos, pero probablemente fue el mejor sitio en el que comimos en el fin de semana. Un aspecto pintoresco y una terraza cubierta no hacen justicia a lo que luego vas a probar allí. Esa noche confirmamos la sana costumbre de comer con cava, una estupenda elección. Es verdad que el ambiente ayuda, y no es lo mismo que hacerlo en Madrid… pero probadlo.

De entrantes tomamos unos erizos de mar, ligeramente cocinados para suavizar su intenso sabor. Simplemente espectaculares. Después,  un salmón marinado que nos dejó impresionados. Se sirve con un poco de alioli (muy típico en los restaurantes de levante) y pan tostado. No podemos hacer otra cosa que recomendaros ambos platos.

A Restaurante La Venta Barcelona Tenemosqueir Erizos y Salmon

Como plato principal hubo disparidad: atún a la plancha con sanfaina (parecido al pisto. Quizá la mezcla no sea muy acertada porque tiene mucho sabor y el atún pierde protagonismo, pero por separado son un acierto), langostinos y verduras en tempura, merluza con verduras, todo a la plancha y bacalao al pil pil. Todo nos gustó bastante, y la materia prima estaba muy buena, así que guíate por lo que más te apetezca porque no te vas a equivocar.

A Restaurante La Venta Barcelona Tenemosqueir Atun Pulpo

De postre probamos la tarta fina de manzana (cuando dicen fina es fina, estuvimos tentados de cogerla con la mano y probar si se podía ver a través de ella;), y además está muy buena), la crema catalana (típico, no podíamos dejar de probarla), requesón (bien ejecutado) y el soufflé de helado de naranja (ligero, suave, fresco, se deshace según lo tomas, genial). Igualmente, todos estaban a un nivel muy alto, pero quizá la tarta y el suflé ganaban por medio cuerpo.

2. Mirablau, copazo y vistas

DIRECCIÓN: Plaça Doctor Andreu s/n, Barcelona // TELÉFONO: 93 434 00 35

Después de cenar, cruzamos la calle y fuimos a Mirablau , un bebercio en el que tomarnos una copita en la terraza con vistas a la ciudad y, según dicen, “el local con las vistas más codiciadas de la ciudad condal”.  No nos pareció una exageración. Así podréis discutir los planes turísticos que habéis montado viendo gran parte de la ciudad y suponiendo dónde están los monumentos que visitaréis a lo largo del finde.

A Restaurante Mirablau Barcelona Tenemosqueir

3. Arenal, gastronomía de playa y vistas al mar

DIRECCIÓN: Paseo Marítimo de la Barceloneta, s/n (frente al Hospital del Mar, a nivel de playa) , Barcelona // TELÉFONO: 93 221 08 10// PRECIO: 30-40 €/persona

Al día siguiente, después de pasarnos la mañana montados en el autobús turístico, nos bajamos en la playa de la Barceloneta. Ahí elegimos Arenal. ¿Qué mejor, para aprovechar el buen tiempo, que comer cerca del mar? Y al final, más que cerca al lado, porque nuestra mesa limitaba con la arena.

Estando en el mediterráneo no podíamos dejar de probar la típica fideuá. Ayudados por un gran marco nos gustó bastante y creímos haber acertado. Nos sorprendió el tipo de fideos, más finos y alargados a los que estábamos acostumbrados, pero nos convencieron mucho.

A Restaurante Arenal Barcelona Tenemosqueir Fidegua

Para terminar tomamos fresas calientes a la pimienta negra y helado de vainilla, por recomendación del chef, y no pudimos rematar mejor la jugada. Lo malo, que ahora toca volver a levantarse para hacer turismo, aunque nos apetecía más movernos un metro de nuestra mesa y tumbarnos en la playa.

A Restaurante Arenal Barcelona Tenemosqueir Fresas Calientes

4. Bodega Sepúlveda, la cocina catalana más típica

DIRECCIÓN: Sepúlveda 173 bis, Barcelona // TELÉFONO: 93 323 59 44 // PRECIO: 25-35 €/persona

Después de rematar la tarde entre paseos por el barrio gótico e iglesias de leyenda, elegimos para cenar un sitio tranquilo y típico donde sumergirnos de lleno en la gastronomía catalana. Fuimos a Bodega Sepúlveda.

A Restaurante Bodega Sepulveda Barcelona Tenemosqueir
Para empezar, pa amb tomaca, no puede faltar, y aunque lo probamos en casi todos los sitios, éste nos gustó especialmente. Para picar nos animamos con la coca de la casa, con atún y pimiento, y no fallamos. También pedimos unos berberechos al vapor que estaban espectaculares.

En los segundos probamos con algo que nos llamó la atención: chipirones frescos salteados con judías de Santa Pau. La mezcla nos sorprendió positivamente y además, degustamos las judías típicas de la zona. También tomamos bacalao a la Llauna (con ajo y pimentón) y rodaballo fresco.

A Restaurante Bodega Sepulveda Barcelona Tenemosqueir Atun

Rematamos con un brazo de gitano casero, que era una exaltación del chocolate. Y un requesón espectacular.

A Restaurante Bodega Sepulveda Barcelona Tenemosqueir Postre

5. Obama, cervezas de todo el mundo en compañía del presidente

DIRECCIÓN: Gran Via de les Corts Catalanes, 603, Barcelona // TELÉFONO: 93 301 65 24

De vuelta al hotel podemos distraernos un rato en Obama. Sí, es lo que estáis pensando y, si queréis podéis haceros una foto con el presidente en estatua, que está en la terraza permanentemente, haga frío o calor. Los asuntos de estado americanos pueden esperar mientras degustáis cervezas de todo el mundo.

A Bar Obama Barcelona Tenemosqueir

6. Masia Can Cortès, babero y calçots en Sant Cugat del Vallès

DIRECCIÓN: Avinguda de Can Cortés, 36, Sant Cugat del Vallès, Barcelona // TELÉFONO: 93 674 17 04 // PRECIO MENÚ CALÇOTADA: 29,90€ entre semana y 37,50€ fines de semana.

Para despedir nuestra última comida vamos a buscar algo diferente. Nuestra visita coincidió con la temporada de calçots (por lo que nos contaron, febrero y marzo son los meses más prolíferos; hasta Semana Santa, más o menos), y teníamos que aprovechar dicha coincidencia. Los calçots son, no os avergoncéis, nosotros tampoco lo sabíamos, una variedad de la cebolla; aunque su sabor nos recordó más al del puerro, más suave. De todas formas, nos dijeron que ni cebolla ni puerro, son calçots. No es comparable con nada. Así sea.

Para tomarlos tuvimos que salir de Barcelona, pero no mucho. De camino al Tibidabo, en Sant Cugat del Vallès, encontramos la Masia Can Cortès, donde, aunque no llega al clásico de tomarlos en el jardín con los amigos, se acerca bastante.

Para los profanos es una auténtica experiencia. Para empezar, te ataviarán con un babero y unos guantes de plástico. El calçot se cocina directamente en la llama, lo que hace que esté quemado por fuera pero sorprendentemente jugoso por dentro. Pero eso implica que cuando te traigan la teja llena con estas peculiares verduras te llenaras de manchas de hollín.

A Restaurante Masia Can Cortes Barcelona Tenemosqueir calcos
Se sirve con salsa romesco. Toda una ‘salsa’ compuesta esencialmente por verduras y frutos secos. Aunque por supuesto, como en todas las salsas, cada cocinero le da su toque.

Nos pareció que estaban buenos, aunque quizá el sabor cansa un poco si te pasas con la cantidad. Lo que es una mala noticia ya que, si todos los comensales quieren calçots, se servirán infinitamente.

Después es típico tomarse una barbacoa de carnes, con butifarra, cordero… Y por supuesto, eso es lo que hicimos. Es habitual porque se usan las brasas que quedan de cocinar los calçots para hacer la carne. Aunque en nuestro caso fuera algo más testimonial que contundente.
Y por supuesto, rematamos con crema catalana. Todo esto y un café incluido en el menú de la calçotada. En general está bien, pero quizá nos pareció demasiado preparado para turistas y poco familiar, aunque bueno, eso es lo que somos;) en este viaje.

Se nos acaba el tiempo. Tan sólo nos queda asombrarnos con las obras de Gaudí por la tarde antes de volver a la estación de Sants y regresar a Madrid mientras repasamos las fotos, nos echamos crema para quemaduras… y confirmamos que

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