TIPO DE COMIDA: Tradicional japonesa (Ramen)
PRECIO: 20-30 €/persona
DIRECCIÓN: C/ Echegaray 9, Madrid
TELÉFONO: 640 65 13 46
HORARIO: Cierra lunes y domingo todo el día y de martes a jueves al mediodía
Chuka Ramen Bar es un pequeño local al estilo japonés con iluminación suave y mucha madera. Entrar en Chuka Ramen es como trasladarse al antiguo Japón.
De beber tomamos una cerveza de arroz para meternos en el papel 100%, era bastante suavecita, pero estaba muy buena. La carta empezaba con una selección de deliciosos buns, luego gyozas, ramen, algunos platos de temporada… y terminaba con un único postre. Aquí podéis consultar la carta completa:
Empezamos tomando unos baos, que son unos panecillos asiáticos un pelin dulces que se pueden rellenar de diferentes cosas y que últimamente están súper de moda.
El primero en llegar fue el Bao de Pastrami que picaba un poco. Él pastrami es una especie de fiambre de vacuno asado con muchísimo sabor. Esta buenísimo. Cuando fuimos estaba fuera de carta, pero nos han prometido que dentro de poco lo incluirán
Luego tomamos el Bao de Panceta Asada. La panceta se deshacía, el pepino le daba un toque muy original, la verdad que una mezcla de sabores muy acertada. Estaba espectacular. Sin duda, pídelo.
Después llegaron unas riquísimas Gyozas de pollo y ajo negro.Una presentación diferente a lo que nos solemos encontrar, ya que tenía una masa llamada hane en forma de costra por encima. El relleno estaba buenísimo y picaba un poquito.
Para terminar pedimos uno de los platos de temporada: Yukhoe (steak tartar coreano) con pera, berros.. Y nuevamente volvemos a sorprendernos. Un plato espectácular y no solo por su colorida presentación. El punto dulce de la pera le daba el toque definitivo para triunfar.
De postre no había mucho margen de elección así que pedimos el Mochi Donut (pastel de arroz japonés con helado de jengibre y yuzu).
Cuando solo hay un postre en la carta sabes que es porque no puede fallar. Así que lo pedimos y no nos arrepentimos. El helado sabia bastante parecido al limón y el donut de arroz estaba como caramelizado. Muy bueno.
En resumen nos encantó el restaurante, sobre todo la espectacular comida aunque el lucal también tenia mucho encanto.
Definitivamente…